Cristóbal Vega Álvarez nació poeta y murió poeta. Yo, Jana la de la niebla (Ana Vega Burgos en el mundo real), su hija, siento que lo más íntimo que puedo hacer por él, para darle una alegría donde quiera que esté, es ir poniendo en este blog, poco a poco, los incontables poemas que fueron el sentido y la justificación de su vida, lo que le hizo vivir hasta los noventa y cuatro años con el alma llena de ilusiones.
Escribir era el estímulo que le impulsaba, la campana que repicaba sobre su corazón para hacerlo latir. Escribir lo salvó de la locura de más de veinte años en prisión, de la desesperanza de perder a su amada, mi madre, Antonia Burgos Béjar, "la escritora campesina" de Villafranca de Córdoba. También hablaré de ella en estas páginas e insertaré algunos escritos suyos; en fin, mi intención es que vuele en estas ondas su recuerdo hasta el fin de los tiempos, hasta que todos volvamos a encontrarnos, como ellos decían, tras la orilla infinita.

viernes, 3 de junio de 2011


EL ÚLTIMO "POR QUÉ"

Esa mínima parte de cosas que sabemos
-(que nos hace creernos sabios y poderosos)-
¿no será la tupida sombra que nos impide
ver la luz tras de los horizontes remotos...?

Al hombre, que ha ganado la tierra, el mar y el aire,
que triunfó de las fieras y venció a los colosos,
y que en su petulancia ha llegado a creerse
el dueño omnipotente y absoluto de todo...

¿Cómo no se le habrá ocurrido pensar
que por mucho que ahonde, nunca llegará al fondo,
y que tras el "por qué" del último "por qué"
siempre le ha de quedar otro"por qué" más hondo...?



2 comentarios:

  1. Mi querida Jana: Cada vez que leo algún poema de tu padre me doy cuenta la riqueza tan grande que tenía dentro de su alma. Hay una conexión directa alma-alma.

    Brisas y besos.

    Malena

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  2. A mí me pasa lo mismo, Malena, y eso que se supone que los conocía todos a fondo. Pero ahora que los voy copiando, y leyéndolos dos y tres veces, lo admiro tanto que me doy cuenta de que no, no es posible que todo se pierda con la muerte física. El alma tiene que estar, seguir, y volveré a charlar con él.
    Gracias por pasar por aquí. Un beso.

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