Niños atemorizados
CADA MOMENTO TIENE SU MOMENTO
(A unos padres irreflexivos)
Si cien generaciones de errabundos
y bohemios palpitan en su sangre
y la severidad y el grito son
el crisol donde se funde su carácter,
¿cómo esperar que esa criatura sea
dechado de virtudes ejemplares...?
Si el mal humor y la palabra airada
constituyen su "música" constante,
y se juzgan delito las diabluras
inherente a cualquier infancia amable,
¿cómo esperar, entonces, que posea
la gracia y las virtudes de los ángeles?
No se pueden pedir peras al olmo
ni esperar que las leyes de la vida
modifiquen los cauces naturales...
¡El niño se comporta como niño!
La vida tiene diferentes fases:
el niño es... ¡el mañana! Y tú... ¡la tarde!
Sublime y ejemplificador poema. Cuánto amor y talento hay en sus versos. Maravilloso. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Alma. Mil besos.
ResponderEliminarSoy una lectora (aunque no muy asidua)del blog de Pelayo, hoy que tenía un ratito libre le eche una miradita, me llamo la atención al ver el nombre de tu padre y me he tomado la libertad de entrar en tu págian y hablarte de el,pero voy por parte, empezaré desde el principio.
ResponderEliminarNo se como dirigirme a ti, yo te voy a llamar ( si me lo permite como yo te conocí.
Cuando he visto esta tarde el nombre de tu padre, he dicho , no puede ser, mi amigo Cristobal por aqui (no sabía que había muerto,mi más sincero pesame, era un gran amigo mío.
Anita Paqui, te llamaban tus padres, así te conocí yo,pequeñita y con unos padres que adoraban,tu padre sabía mi amor por la lectura y aunque yo era muy jovencita 13, 14, 15 el me llevaba a mi casa todo lo que escribía para que yo le diera mi opinión, yo me sentía muy importante porque tenía un amigo escritor y a la vez me intimidaba yo pensaba que yo era una inculta a su lado,me leía sus poesias, yo me quedaba encantada, cuano publico "Por la riberas del Tinto", me lo regalo y dedicado, todavía lo conservo, con sus tapas rosas,fue uno de los regalos más bonitos que recibido, me emocioné, claro que entonces era muy joven y no quería que nadie me viera llorar.
Le pidió permiso a mi madre para poder venir a casa y leerme, me encantaba, me sentía afortunada.
De tu madre tengo muy buenos recuerdos, yo decía cuando sea mayor quiero ser como ella,tenía un encanto, una clase un enamoramiento hacia tu padre pero era su dulzura,a mi entonces me parecian una pareja de película.
Siempre que venian a Niebla se pasaban a visitarnos, cuando dejaron de venir, he preguntado por ellos y nadie me ha dado razon ninguna.
Te estaras preguntando que quien debo ser, no se si te acordaras de mi familia,soy la chica (abuela ya) donde tus padres iban a hablar por teléfono, en aquella época iban mucho por allí por eso los conocia tan bie.
Creo que me he extendido mucho, pero se que te agradara saber que tengo un buen recuerdo de tus padres.
Me agradaría seguir en contacto contigo
"Anónimo", me ha emocionado leer tus palabras. Yo recuerdo en la calle Real un locutorio al que íbamos a hablar por teléfono, la encargada era Manoli, ¿eres tú acaso esa Manoli? Dime tu nombre, aunque hace tantos años yo recuerdo a mi gente de Niebla, imposible olvidar.
ResponderEliminarTus recuerdos acerca de mis padres son muy exactos, mi padre era un gran hombre, gran poeta y gran maestro, ésa era su vocación. En el apartado "etiquetas", de la derecha, hay una entrada que titulé "biografía", ahí está lo que he podido entresacar de tantas y tantas anécdotas que me contaba; también hay otra entrada con la etiqueta "aniversario de su partida", fue al principio de empezar este blog, cuando nadie lo conocía ni lo leía. Murió el 31 de mayo de 2008, sólo hace tres años.
Mi madre era, también, tal como tú la describes; lo que más ahonda en mis recuerdos era la ternura que salía de ella, con la que nos envolvía. Era una mujer muy fuerte pese a su aparente fragilidad, y tenía un altísimo sentido del deber, lo tuvo hasta el final: ella murió el 21 de enero del 97, hace muchos años ya, y mi padre quedó muy desgarrado.
Claro que me encantaría proseguir el contacto contigo. En este blog voy publicando poemas de mi padre, en el otro -desde mi niebla- pongo cosillas mías, o poemas que me llegan, canciones, anécdotas, lo que me pide el corazón en cada momento. Pásate por los dos cuando quieras, siempre serás muy bienvenida.
Mil besos.